Volviendo a los volúmenes esenciales en el salón
Hay casas que disponen de salones enormes de más de 20 metros cuadrados, en contraposición con los minipisos de 30 que también son habituales, los que viven en casas pequeñas suspiran por una vivienda más grande, sin embargo a la hora de afrontar la decoración aunque pudiera parecer lo contrario, decorar y amueblar espacios grandes resulta casi más complicado.
Decorar espacios pequeños requiere el esfuerzo de buscar muebles multifunción y organizar bien, pero haciendo una buena selección de elementos básicos el mercado nos ofrece infinidad de soluciones para conseguir un conjunto confortable, sin embargo en un espacio muy grande es difícil saber por donde empezar, aunque compremos un par de sofás un salón muy grande se sigue viendo vacío.
A la hora de decorar espacios abiertos y grandes hay que llenarlos para que el ambiente sea acogedor, sin embargo corremos el riesgo de recargar en exceso y que finalmente transmita sensación de agobio, por eso si en una misma habitación vamos a incluir muchos muebles es importante que estos sean sencillos, de formas básicas para no colapsar.
La vuelta a los volúmenes esenciales, se refiere a aunar las ventajas de las composiciones modulares con elementos sencillos para todas las funciones, por ejemplo en la imagen vemos una propuesta de Joquer en la que se presenta una composición a base de módulos de mesas, puffs, sofás y chaise longue elaboradas a partir de formas geométricas básicas.
Este tipo de composición tiene varias ventajas, por un lado el dinamismo ya que nos permite ir variando la posición y el orden de los módulos para variar la decoración de vez en cuando y que no nos aburra, por otro lado la posibilidad de añadir o eliminar piezas en el conjunto en función de las necesidades de cada momento.